Debemos tener presente que los alimentos fritos no son una opción dietética saludable. También debemos saber que las grasas contenidas en la proteína animal son más saludables que el aceite alterado mediante el calor, cuando fritamos alimentos. Los fritos no solamente son muy difíciles de digerir, son una de las mayores causas de diabetes, enfermedad cardíaca, sobrepeso y la muy notoria epidemia mundial de obesidad.

¿Por qué es peligroso comer alimentos fritos con frecuencia?

La fritura de los alimentos consiste en aceites que son altos en grasas trans y grasas saturadas que elevan el nivel de colesterol en la sangre, obstruyen las arterias y conducen a enfermedades cardíacas y obesidad. Más dañino para el organismo es el hecho que a algunas frituras se les agrega harina, huevo, pan rallado, leche, etc. Estos ingredientes, agregados al azar para hacer más agradables ciertas preparaciones, contribuyen a dificultar el proceso digestivo.

Alimentos como carne magra, pescado, verduras o pollo son más benéficos al vapor, cocinados o asados, pues pierden muchos nutrientes al freirse. Las personas sometidas a cirugía bariátrica prácticamente deben olvidarse de por vida de los fritos.

Según un estudio publicado en 2009 en el Diario de Endocrinología Clínica y Metabolismo del Colegio de Medicina Monte Sinaí (E.U.), la reducción del consumo de alimentos fritos incrementa las defensas naturales del cuerpo. El mismo estudio incluyó el comportamiento de hijos por ejemplos alimenticios de sus padres y determinó que estos últimos tienen un papel fundamental en la obesidad infantil pues los niños y jóvenes son más propensos a comer aquello que coman sus padres.